bella escort Vip Caballito

LOS FANTASMAS DEL BARRIO

Una bella escort Vip de Caballito, tan ardiente como buena conocedora de su entorno, nos contó historias inquietantes. Porque Caballito no solo es el centro geográfico de la ciudad de Buenos Aires.

Es un barrio pionero en muchos aspectos. Tuvo el primer tren (“La Porteña”, que en parte de su traza corre hoy el Ferrocarril Sarmiento). Tuvo el primer subte (el A), y el primer colectivo (la línea 1). En el complejo del ex El Hogar Obrero, está el primer edificio inteligente, y se instaló el primer supermercado porteño. Nada mal para este “ombligo de la ciudad”.

Además, hace punta en la cantidad y calidad de historias “paranormales” (mayormente sangrientas, de esas que te hacen dormir con la luz encendida…) Tal vez solo lo superan Chacarita o Recoleta. Pero esos barrios tienen la ventaja de contar con enormes cementerios, que siempre son una cantera inagotable de historias fantasmales.

La bella escort Vip de Caballito y el fantasma de calle “La Nave”

Esta joven, enamorada de su barrio, recuerda que tanto ella como muchos otros vecinos han experimentado encuentros con cierto fantasmagórico personaje.

Este barrio porteño es conocido por ser muy tranquilo y familiar. Pero no tanto en la parte “inglesa”, con sus viviendas construidas en 1923. Es entre las calles Emilio Mitre y Del Barco Centenera, donde está el pasaje “La Nave”. Los residentes por allí no viven totalmente en paz.

Dicen que constantemente se puede percibir la presencia de “alguien”, que nunca están solos. Los perros se vuelven locos a la hora de salir a pasear, entre otros inquietantes fenómenos. Se pueden oír sus pasos, ruidos extraños, y sentir cómo el viento comienza a soplar repentinamente. ¿Quién es ese fantasma? Aún no se sabe.

Pero se sospecha. La leyenda cuenta que en la década de 1950 vivía un hombre que era obrero en el taller de subtes ubicado a la vuelta de La Nave. Se habría enamorado locamente de una mujer que no le correspondía. Entonces, al no poder revertir la situación, se deprimió y terminó suicidándose. Vivía en esa calle, y su espíritu quedó allí, dando vueltas.

Aunque los vecinos han intentado echarlo, a través de “médiums” y exorcistas, sigue deambulando, asustando gente y aguardando el imposible regreso de su amor.

Excursión al más allá

Pero hay fantasmas un poco más queridos. Mensualmente, se organizan excursiones para conocerlos. En Caballito, hay gente que ve a los fantasmas, como inspiración poética, y organizan visitas nocturnas para buscarlos en el hermoso y emblemático parque Rivadavia, símbolo por excelencia del barrio, o en insospechados recovecos de las zonas más concurridas (o más escondidas).

La pareja formada por Marina Bussio y Héctor Núñez Castro, resguarda historias y leyendas de su amado barrio hace 15 años. También edita el mensuario Horizonte (www.caballitotequiero.com.ar) y sostiene la Junta de Estudios Históricos del barrio. Entre otras cosas, organizan esta expedición, los primeros sábados de cada mes. Convoca a unos 20 o 30 curiosos y no sin cierto espíritu de aventura.

Sangre y amores

Este simpático matrimonio (cuya pasión por el barrio los llevó a casarse a bordo del pintoresco tranvía que recorre el vecindario) enumera algunas de las trágicas historias “proveedoras” de fantasmas para la mitología local.

Por ejemplo:

*La tragedia en casa de los Lezica. Cuentan que una atractiva planchadora de raza negra enamoró al joven hijo de su patrón, jefe de una muy aristocrática familia. Pero ella terminó degollada, y él apareció colgado de un eucaliptus que Sarmiento había regalado a la familia.

*En José María Moreno y Rivadavia, allá por 1906, un niño llamado Cayetano Santos Godino, de unos diez años, se llevó a una nena italiana de tres o cuatro. Y la ahorcó en un baldío de la calle Río de Janeiro. Fue uno de los primeros crímenes que lo harían famoso como “El Petiso Orejudo”, que por muchas décadas fue el mayor asesino serial del país, hasta la irrupción de Carlos Eduardo Robledo Puch.

*En la super concurrida zona de “Primera Junta,” allá por 1927, el famoso anarquista español Buenaventura Durruti (muerto nueve años después en la Guerra Civil Española) mató de un tiro a un agente de policía de apellido Núñez. Fue tras asaltar la boletería del subte para “expropiar” la recaudación de la línea A. Luego descubrió que solo se había llevado un cofre vacío.

Hay decenas de historias más, de crímenes, pasiones, tragedias… ¡Y muchos fantasmas!